Esta clase constituye una introducción a la Psicología del cuidado, que hace referencia a las habilidades psicológicas que precisan los profesionales de Enfermería y su aplicación en el contexto laboral con pacientes y sus familiares, así como con los compañeros de trabajo.
Una de estas habilidades es la autoestima, la cual tratamos en la presente sesión.
La autoestima es la forma en que uno se percibe y se siente a sí y es una manera de expresar que somos conscientes de nuestra existencia. No es más que la unión de la confianza y el respeto hacia uno/a mismo. Son muchos los aspectos que contribuyen al bienestar psicológico y favorecen una adecuada autoestima, por ejemplo, tener una buena auto-valoración, disponer de una red de apoyo social fuerte, estable y positiva, y adoptar una filosofía optimista ante la vida.
Estimarse significa mantener una activa búsqueda del propio mejoramiento, no por "ser el mejor", sino por ser "uno mismo" lo mejor que uno puede.
Los enfermeros tienen que tomar decisiones a diario para dar solución a los problemas de salud que presentan sus pacientes; deben cuidar a los demás sin olvidar cuidarse a ellos mismos, con lo que resulta imprescindible gozar de una buena autoestima.
Existen algunas características definitorias de una adecuada autoestima, como son las siguientes:
- Creer que eres digno de felicidad y de respeto.
- Estar seguro acerca de quien eres y tener seguridad en ti mismo.
- Reconocer las cualidades propias.
- Ser capaz de tener intimidad en las relaciones.
- Ser capaz de mostrar tus verdaderos sentimientos.
- Ser capaz de reconocer los propios logros.
- Tener habilidad para perdonarse y perdonar a los demás, y saber admitir errores, sin dejar de sentirte orgulloso.
- No compararse con los demás ni sentir envidia ajena.
- Dar bienvenida a los cambios, sin temer a los mismos.
- Actuar independientemente, asumiendo las responsabilidades de tus acciones, metas y deseos.
- Ser capaz de tomar nuevos desafíos, pudiendo recibir la crítica sin sentirte herido.
- Vivir la vida con un propósito concreto.
La autoestima te permite tener el control de tu propia vida, te capacita para hacer lo que deseas y es fuente de salud mental, y es por ello por lo que es importante.
Para ser feliz hay que quererse a uno mismo en su justa medida, no más de la cuenta. Si uno se quiere demasiado está poniendo los medios para no ser feliz.
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